MONO Eyewear es el nombre de la empresa que presentó su proyecto en Indiegogo, plataforma de financiamiento colectivo, en donde busca lograr los fondos necesarios para poner en marcha su idea: marcos de anteojos creados con impresoras 3D.
Las ventajas del producto, dicen sus creadores, pasa por varios puntos. Si bien no son económicas (u$s100, al menos por ahora), la posibilidad de ajustar al máximo las dimensiones del marco (vienen en tres tamaños) y la mayor durabilidad son las principales características.
El marco se construye en una sola pieza, a diferencia de los tradicionales, que vienen con varias partes y de ahí que puedan romperse o aflojarse con el paso del tiempo.
Como las patillas son flexibles y de tamaño a elección, los marcos de MONO Eyewear se ajustan a la cabeza de una manera más eficiente. El usuario puede elegir también el tamaño del soporte para la nariz.
Las lentes se encastran en el marco, lo que permite desmontarlas de manera sencilla y convertirlas en gafas de sol de ser necesario. Los creadores aseguran que es la solución para aquellos que no desean llevar dos anteojos a todos lados. Además, el producto final es mucho más liviano que los tradicionales.
MONO Eyewear planea ofrecer cinco estilos de marcos en cuatro colores: negro, blanco, azul y rojo.
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